El Mercadillo Solidario de INEA ha celebrado esta semana su décima edición. Diez años congregando a los hortelanos de los Huertos Ecológicos y por segundo año, a los de los Huertos Urbanos –a los que INEA guía técnicamente-. Ellos ponen a la venta sus productos de la huerta y destinan la recaudación a un fin solidario. En esta ocasión, los 2.200 euros recaudados se destinarán al Centro Apu Palamguwan de Educación Cultural (APC), de Mindanao, Filipinas, donde estudian Secundaria los primeros 30 alumnos y se pretende incorporar a otros 20. Pero este día, a pesar de la amenaza de la ciclogénesis, muchos miembros del claustro de INEA y los técnicos; voluntarios de Entreculturas, de Red Incola, de Come Sano Come Justo, de Oxfam Intermón, de la Asociación de Vecinos de Barrio España y de la Fundación INTRAS convierten esta jornada en un encuentro festivo ya ineludible.
Para quienes forman parte de la Plataforma Apostólica de Valladolid, es una ocasión de comprar productos ecológicos de temporada y un buen momento para compartir el ecomenú. Un día de campo con juegos –por ejemplo el torneo de fútbol entre profesores de INEA y de San José contra los universitarios del Centro Loyola- y con premios. Este año se ha convocado un certamen de relatos cortos, un premio a la mejor cesta de hortalizas y la subasta de una cesta generosa que ha alcanzado un valor de 38 euros. Mucha participación de mucha gente para organizar, colocar, preparar y dedicar tiempo e ilusión. Y como cada año, representantes del Ayuntamiento apostando abiertamente por esta iniciativa que reúne a una gran diversidad de gente unida por un sólo motivo solidario.