En el Campus de Sevilla se ha acogido este evento,que ha congregado a más de un centenar de representantes de universidades jesuitas procedentes de 28 países del mundo, desde Corea del Sur o Japón, hasta Argentina, Chile, El Salvador o México, pasando por Líbano, Australia, Estados Unidos, Costa de Marfil, Burkina Faso, Madagascar o Alemania, Suecia o Italia, entre otros.
Este encuentro, que se celebra por segunda vez tras la edición desarrollada en la Universidad Iberoamericana de Puebla (México) en 2019, reúne a los vicerrectores y responsables de Relaciones Internacionales de universidades jesuitas de todo el mundo para establecer oportunidades de colaboración y trabajo en red, estrechar lazos y fortalecer alianzas con el objetivo de trabajar conjuntamente al servicio de la misión compartida como instituciones de la Compañía de Jesús.
En las diferentes ponencias se han abordado algunas de las líneas de trabajo prioritarias para las universidades de la Compañía de Jesús, integradas en la International Association of Jesuit Universities (IAJU), que representa la red de instituciones de educación superior más grande del mundo y que se compone de más de 180 centros de los cinco continentes. Así, se ha puesto de manifiesto la necesidad de potenciar el trabajo en red, siempre compaginando las estrategias locales con las globales, de manera que se pueda responder mejor a los retos que plantea el s. XXI, y se pueda formar a los estudiantes como ciudadanos globales, con vocación de mejorar el mundo.
La mayor red educativa global
Una de las conferencias centrales de este congreso fue la protagonizada por Joseph Christie SJ, secretario de Educación Superior de la Compañía de Jesús y presidente de IAJU, que ha considerado que este encuentro es “fundamental para el intercambio de experiencias y buenas prácticas, así como para reflexionar conjuntamente”. Durante su intervención, Christie ha recordado que “las instituciones de educación superior de la Compañía de Jesús constituyen la mayor red educativa global” por lo que “tenemos ante nosotros una gran responsabilidad”.
Así, ha asegurado que “hoy más que nunca tenemos la necesidad de formar a estudiantes para hacerles conscientes, con una perspectiva global, de la necesidad de hacer frente a retos a escala mundial como el crecimiento de los nacionalismos, la creciente hostilidad hacia otras culturas o religiones, o el cambio climático”.
“Estamos viviendo en una era de la globalización marcada por la interdependencia y la interconexión, facilitada por las nuevas tecnologías, por lo que es crítico establecer una mayor colaboración que permita compartir fortalezas y dar como resultado mayores sinergias”, ha señalado también Christie.
Fomentar asociaciones en red como clave para el éxito de la internacionalización de la educación
El congreso también ha contado con la participación del vicepresidente ejecutivo de la ONG jesuita Entreculturas, Daniel Villanueva SJ, patrono de la Fundación ESADE y de la Fundación ICAI – Universidad Pontificia Comillas, quien habló de la colaboración y el trabajo en red como seña de identidad de la Compañía de Jesús y como la mejor forma para dar respuesta a la misión de las instituciones universitarias jesuitas.
Igualmente participaron líderes de instituciones y asociaciones de educación superior, como Alfonso Gentil Álvarez-Ossorio, director del SEPIE (Servicio Español para la Internacionalización de la Educación), que explicó la composición de la estrategia de la UE y en particular los fondos Erasmus+, dentro de los cuales la Universidad Loyola ha solicitado este año 22 proyectos de movilidad en dimensión internacional para fortalecer la colaboración en red con las instituciones que componen esta red internacional IAJU. Asimismo, dio una serie de perspectivas para maximizar los fondos europeos, incluida la importante iniciativa de Universidades Europeas en la que Kircher, red de universidades jesuitas europeas, quiere también participar.
Por otro lado, intervino Laura Rumbley, directora de Investigación y Conocimiento de la Asociación Europea de Educación Internacional (EAIE), la asociación más grande de educadores de educación superior en Europa y que acaba de celebrar su conferencia anual en Barcelona, con el mayor número de participantes hasta la fecha, más de 6.000. Tanto Gentil como Rumbley abordaron los retos del sector de la educación superior en España y en el mundo y coincidieron en señalar la importancia de fomentar asociaciones en red como clave para el éxito de la internacionalización de la educación en el contexto global actual.
Las universidades jesuitas en África
Los representantes de las universidades jesuitas en África, liderados por François Kaboré SJ -presidente de la Asociación de Universidades Jesuitas de África-, expusieron la situación de la educación superior en este continente, asegurando que la juventud y el potencial de las universidades jesuitas africanas requieren la colaboración y el intercambio con el resto de la red global jesuita para continuar creciendo y cumplir con su misión de facilitar el acceso a la educación. Loyola, como la universidad jesuita y católica más al sur de Europa, y de reciente creación, está trabajando también en proyectos de capacity building para las nueve iniciativas universitarias que se están desarrollando en diferentes países de África. Todos los representantes africanos han venido con apoyo financiero del programa Erasmus+.
Entre las conclusiones extraídas a la finalización del programa de ponencias e intercambios, Borja Martín Garrido, director de Relaciones Internacionales de la Universidad Loyola, ha señalado que la asociación debe ganar visibilidad, por ejemplo, buscando sinergias con asociaciones profesionales como la europea EAIE, las americanas AEIA y NAFSA y la asiática APAIE, de manera que las universidades jesuitas estén representadas en esos grupos con voz propia. También ha mencionado la necesidad de una representación internacional más igualitaria dentro de la asociación que permita aprender más de otras realidades como las que se experimentan en África o el Sudeste Asiático y, sobre todo, crear identidad común bajo una cultura de la generosidad.
Martín, como coordinador de la conferencia, comunicó al secretario de Educación Superior la creación de un comité de dirección en IAJU que contaría con dos representantes de cada región y que quedaría encargado de redactar y proponer las metas, misión y visión de la asociación para la siguiente conferencia en el ámbito de las relaciones internacionales.
Además de las sesiones plenarias, el congreso contó con actividades paralelas, reuniones de las diferentes asociaciones regionales y diversas visitas culturales a las ciudades de Sevilla y Córdoba.