XVI Simposio IQS: La Misión de la Compañía de Jesús en la nueva Provincia de España

En el marco de la apertura del XVI Simposio IQS el pasado 16 de enero, dedicado a analizar «La Misión de la Compañía de Jesús en la Nueva Provincia de España», el Dr. Pedro Regull, director general IQS, valoró la importancia y la necesidad de este espacio de reflexión que desde hace dieciséis años brindan a la Comunidad IQS los profesores Dr. José Sols y Dr. Albert Florensa, desde la Cátedra de Ética y Pensamiento Cristiano de IQS. El director general IQS agradeció la presencia de los ponentes del máximo nivel: el P. Francisco José Ruiz, SJ, provincial de España, el Dr. Carlos Losada, delegado adjunto del Sector de Educación Universitaria y director de UNIJES, el P. Enric Puig Jofra, SJ, presidente de IQS, y el P. Llorenç Puig, SJ, delegado de la Plataforma Apostólica de la Compañía de Jesús en Cataluña. Agradeció asimismo la respuesta de los numerosos asistentes que, como cada año, son profesores, investigadores, PAS y alumnos de doctorado.

El Dr. José Sols, al presentar la jornada, ponderó la trascendencia de la nueva provincia de España de la Compañía de Jesús, una realidad vigente desde junio de 2014 que supone la unificación de las diversas provincias existentes en España en una sola Provincia, un hecho que va más allá de «un cambio de líneas en un mapa». Tal importancia quedó resaltada con la participación de sus más altos representantes, especialmente en el ámbito universitario, que no necesitan ninguna presentación en IQS. Al mismo tiempo, Sols evocó la reciente conmemoración de los 25 años del asesinato de los jesuitas de la UCA de El Salvador, fiel testimonio de una misión comprometida desde la Universidad, desde su condición de universitarios transformadores de la sociedad.

El P. Francisco José Ruiz, SJ, provincial de España, expuso «Los retos que quiere asumir la Compañía de Jesús en la nueva provincia de España», “al soplo de la nueva evangelización” que el Papa Francisco impulsa con su estilo renovador e infatigable. La vigencia vitalizadora de las enseñanzas ignacianas se renueva en el siglo XXI con la presencia por primera vez de un jesuita, y un jesuita americano, al frente de la Iglesia Católica. El P. Ruiz habló de la cuestión de Dios en el centro de los problemas del hombre de hoy, de las nuevas formas de radicalismo evangélico, del compromiso de actualizar conceptos ignacianos. Todo ello resumido en una foto: la salida del atolón, metáfora de la biodiversidad y la complejidad del mundo actual, que siempre lucha por una salida. Así abordó el “discernimiento” o capacidad de adaptación a las necesidades, de escucharlas y saber interpretarlas, evitando la dispersión. Insistió sobre el “carisma” que se ciñe a lo central, que se apoya en el laicado; se aproximó a la misión frente al subjecto, en la necesidad de aumentar el Cuerpo, con virtudes sólidas y perfectas. Especialmente en un mundo convertido en una Red Global que tiene como reto la “conexión”, cuyo horizonte es la proximidad a los pobres. Destacó la importancia de la consonancia afectiva con la jerarquía, así como el impulso y la promoción del laicado. Con el fin de crecer en parresía, la alegría de la nueva evangelización, y en profundidad: es decir, una compañía contenta de su buen hacer y libre de complejos.

Acto seguido, el Dr. Carlos Losada, delegado adjunto del Sector de Educación Universitaria y director de UNIJES, examinó «La contribución de UNIJES a la misión educativa y de transformación social de los jesuitas» y recuperó brevemente el paradigma pedagógico de la Compañía de Jesús: formar personas conscientes de sí mismas, con capacidad de autoconocimiento, y de su entorno; competentes en el ejercicio de sus saberes; compasivas ante los demás, con empatía para ponerse en la piel del otro; y comprometidas con la sociedad, y en este caso con la universidad y sus valores fundamentales. Las cuatro «c» de estos adjetivos dieron paso a una mención de los rasgos de la propuesta formativa ignaciana: respuesta a los interrogantes sobre el sentido de la vida, libertad de investigación, diálogo entre la Fe y la Cultura, prioridades ante la escasez de tiempo y de recursos y la exigencia cada vez mayor de hacer compatible la investigación y la gestión. Subrayó que todo ello es fruto de un elemento vocacional central que se traduce en un impulso por hacer crecer la persona y contribuir a la salida del atolón.

El P. Enric Puig Jofra, SJ, presidente de IQS, dictó una precisa y meditada ponencia sobre «La misión de IQS en el actual contexto histórico»: “dadas las particularidades de IQS, no podemos pensar que el contexto descrito en las dos excelentes ponencias anteriores defina y concrete totalmente nuestra función en el contexto de la nueva Provincia. El contexto histórico, social, económico, cultural y eclesial en el que IQS desarrolla su acción, nuestra acción, nos ofrece una serie de retos que no debemos obviar: ecología, investigación genética, responsabilidad ética en la investigación científica, la globalización política y los procesos identificadores nacionales, la empresa respetuosa de los derechos humanos, incluso la misión educativa del centro. No haríamos el trabajo del todo bien si el simposio que nos reúne no nos ofreciera la posibilidad de repensar lo que IQS puede aportar, con el trasfondo de las reflexiones y pautas de UNIJES, a todos, a algunos de estos aspectos cuestionadores”. Su mirada a la situación actual a través de las palabras del Papa Francisco a los representantes de la cultura en Cagliari (Cerdeña) nos mostró la desilusión ante la crisis económica reinante y nos llamó a huir de la resignación y emprender caminos de esperanza. Su aproximación a la universidad es justamente esta: “la universidad es el espacio idóneo de gestión de la sabiduría para discernir y alimentar la esperanza”.

Finalmente, el P. Llorenç Puig, SJ, delegado de la Plataforma Apostólica Territorial de la Compañía de Jesús en Cataluña, clausuró la jornada con comentarios a las tres ponencias. Un mundo en transición, con la esperanza de salir del atolón, en el que se da una gran biodiversidad. La esperanza es la gran movilizadora que impulsa los cambios en la sociedad. Las personas –conscientes, competentes, compasivas, comprometidas– son el gran activo de este futuro. El activo de esta parresía, de esta nueva evangelización, que también halla su camino entre los apasionados por la ciencia, entre los apasionados por mejorar la gestión de las empresas, entre los profesionales tocados por las nuevas realidades de un mundo global en plena transformación.

De izquierda a derecha, P. Llorenç Puig, SJ (delegado PAT Cataluña), P. Francisco José Ruiz, SJ (Provincial de España, y P. Enric Puig Jofra, SJ (Presidente de la Fundación IQS)

Imagen del público asistente a la jornada